La verdad puede no haber salido a la luz en este caso. Este viernes, la velada del Girondins de Burdeos se convirtió en un fiasco con la agresión de Lucas Buades, autor del primer gol de Rodez, por parte de un hincha bordelés. Si bien el resultado final de la reunión aún no ha sido determinado por el Comité Disciplinario de la LFP, muchas voces se han expresado para defender sus intereses. Annecy denunció el “engaño” de los rutenos, provocando la ira de estos últimos. Gérard López, el presidente del club con el escapulario, también había reaccionado al resultado de la reunión, alegando hacer todo lo posible para hacer valer los derechos de su club.
Nuevos elementos podrían ayudarlo en su plan. Según declaraciones del fiscal publicadas en el diario local Sur oeste finalmente, Lucas Buades no fue escoltado al hospital como Nicolás Rainville, el árbitro del encuentro, y la RAF, a través de su entrenador y presidente, han reclamado mucho tiempo después del encuentro. Efectivamente, el jugador de 25 años salió de Matmut Atlantique junto a sus compañeros 2:30 después de que se interrumpiera el partido, según dijo a los medios el representante de la fiscalía. Información que podría cambiar las reglas del juego a juicio de la Liga de Fútbol Profesional.