Han pasado casi 60 años desde que Fiorentina y West Ham ganaron trofeos en el escenario europeo. Baste decir que este miércoles en el Fortuna Arena, el equipo que triunfaría en esta segunda edición de la Europa League Conference marcaría para siempre la historia de su club. Un título tanto más importante cuanto que también permitió a uno de los dos equipos clasificarse directamente para la Europa League la próxima temporada.
En el arranque de esta final, las violas se llevaron solas el partido al acaparar el balón. Pero finalmente fueron los Hammers quienes tuvieron la primera oportunidad de anotar. Declan Rice, en la frontal del área, probó suerte pero su disparo se fue por el lado izquierdo del poste (13º). Un susto que no iba a poner en entredicho la filosofía de los Gigliati, que seguían manteniendo el cuero ante un conjunto londinense que evolucionaba en contra. Los italianos tuvieron la primera oportunidad de sacudir la red tras un córner tras un cabezazo desviado de Nikola Milenkovic (26º). En la primera media hora de juego, las defensas primaron ampliamente sobre los ataques, con muy pocas situaciones de gol. El partido se interrumpió unos minutos cuando Cristiano Biraghi sangraba por la cabeza tras recibir un proyectil (35º). Una primera parte que en su conjunto se vio empañada por demasiadas faltas entre los dos once. Justo antes del descanso, Luka Jovic creyó abrir el marcador tras adelantar un cabezazo de Christian Kouamé al poste, pero el serbio fue señalado en fuera de juego (45º+5).
Jarrod Bowen, el héroe de los Hammers
El segundo período se reinició en las mismas bases con muchos paros por obstrucciones. Sobre la hora de juego, los Irons metieron penalti tras una mano de Cristiano Biraghi en un duelo con Jarrod Bowen (61º). Mohamed Said Benrahma no tembló ante Pietro Terracciano y permitió que su equipo se adelantara (1-0, 62º). Pero a los pocos minutos del primer gol, los de Vincenzo Italiano reaccionaron rápido empatando. Tras un muy buen cabezazo de Nicolás González, Giacomo Bonaventura mandó de volea al costado de la red de Alphonse Areola (1-1, 67º). En una final que (por fin) empezaba a dejarse llevar, Rolando Mandragora estuvo muy cerca de doblar la ventaja de los florentinos (72º).
El final del partido entre los dos equipos fue desenfrenado, los jugadores de ambos lados poco a poco comenzaron a debilitarse físicamente. Areola capturó perfectamente un tiro largo de Sofyan Amrabat en el tiempo de dinero (89). Pero al final del tiempo reglamentario, Jarrod Bowen entregó a todo un pueblo al convertir su cara a cara ante Terracciano, tras un pase excepcional de Lucas Paquetá en profundidad (1-2, 90º). Un éxito en el último minuto del West Ham, que ganó la segunda edición de la Europa League Conference. Después de una temporada mediocre en la Premier League (14º), los ingleses suceden así a la AS Roma, el primer ganador de la competición el año pasado.