El Arsenal no pudo imponer en el trámite y en el resultado la diferencia que existe entre la plantilla de estos combinados. Los de Arteta apenas pudieron rematar 2 veces al arco en el encuentro, consiguiendo anotar en el 86 de partido, un 1-0 que no era el mejor de los marcadores pero que al menos los llevaba con ventaja a la vuelta.
Pues la inconsistencia defensiva volvió a tocar la puerta de los de Londres, quienes vieron como Tomas Holes igualaba las cosas en el 90+3. Incluso, el Slavia tuvo más oportunidades de cara al arco, algo anómalo teniendo en cuenta quien jugaba en campo propio.
Una de las cosas que seguramente se le criticará a Arteta sea el hecho de guardarse algunos efectivos importantes en el banquillo, esto porque cuartos de final ya son instancias sumamente decisivas.
Ahora todo se definirá en Republica Checa, un territorio en el que los Checos se hacen grandes, sino preguntarle al Leicester City o Rangers.