El pasado jueves por la noche, el West Ham United se clasificó para su primera final europea en 47 años, provocando el delirio en un rincón del estadio AZ Alkmaar.
Aunque hubo que esperar hasta el tiempo de descuento del partido de vuelta de la semifinal de la Europa Conference League, cuando Pablo Fornals irrumpió y disparó a puerta, para confirmar la plaza de los Hammers en la final, lo cierto es que valoraron bien el resultado.
No es de extrañar que los jugadores, los aficionados y sus familias celebraran como locos tras el pitido final.
Sin embargo, al hacerlo, pareció despertar la ira de los seguidores ultra locales que irrumpieron en el área familiar donde estaban sentadas las esposas, novias y otros familiares del jugador del West Ham.
Increíble esto, los fanáticos de AZ Alkmaar irrumpieron en la sección donde las familias y amigos de los jugadores del West Ham y los atacaron.
Si el problema fuera un club inglés, estaría prohibido en el fútbol europeo durante años.pic.twitter.com/luMhzNwDK9
— Días de visitante de fútbol (@FBAwayDays) 18 de mayo de 2023
Una vez que quedó claro lo que estaba sucediendo, hubo una reacción natural de algunas de las estrellas de los Hammers para apresurarse y proteger a sus familias.
Sin embargo, esa acción aparentemente podría haberlos llevado a problemas con las autoridades.
De acuerdo a El Telégrafo, la UEFA podría estar dispuesta a prohibir al objetivo del Arsenal Declan Rice, Said Benrahma, Flynn Downes y Michail Antonio de la competencia europea debido a sus acciones.
La sugerencia es que la UEFA puede esperar hasta después de la final para imponer sanciones, pero si van a acusar a los seguidores de Alkmaar por cometer esencialmente el mismo acto, les queda poca opción de hacer lo mismo con los jugadores involucrados.
Es probable que eso provoque una gran reacción en los círculos del fútbol, ya que sentaría un precedente notable en el futuro y alienaría a la UEFA aún más de lo que está actualmente.