Otra prueba está sacudiendo a Inglaterra en este momento. Además del caso de Benjamin Mendy, Ryan Giggs también está en crisis. La antigua gloria del Manchester United se encuentra actualmente en pleno juicio por violencia doméstica. Durante este último, el exseleccionador de Gales aseguró no haber agredido nunca a una mujer. Por tanto, se declaró inocente aunque reconoció, por el contrario, su infidelidad. La leyenda de todo un país (64 partidos con Gales) habló hoy por primera vez en este trial.
Su abogado le preguntó, en varias ocasiones, si alguna vez en su vida había sometido a mujeres a violencia. Especialmente si «alguna vez había tratado de controlar o forzar a una mujer de alguna manera». O incluso si “ya había agredido a una mujer en su vida”. El excapitán galés siempre ha respondido negativamente. Como recordatorio, su ex pareja, Kate Greville, asegura que Ryan Giggs le dio un cabezazo y que le dio un codazo en la mandíbula a su hermana que había intervenido. El exjugador de 48 años enfrenta hasta cinco años de prisión si es declarado culpable de los cargos en su contra.