La maldición continuó para Kevin De Bruyne el sábado por la noche. Asentado en la final de la Champions League del Manchester City ante el Inter de Milán (1-0), el internacional belga finalmente tuvo que ceder su puesto por lesión en el minuto 35 de partido, como en 2021 ante el Chelsea cuando fue víctima de un violento cargo de Antonio Rüdiger.
No tiene la nariz ni la órbita rota esta vez para el maestro belga, pero sí una lesión en el tendón de la corva que le obliga a ver la victoria de su equipo desde el banquillo, y que podría frenárselo durante unos meses. De acuerdo a Correo diario de hecho, De Bruyne podría estar de baja durante casi tres meses, lo que le llevaría a perderse la Supercopa de Europa contra el Sevilla FC el 16 de agosto, pero también el inicio del campeonato.